Al mundo de la literatura sueca se le atribuyen los estilos más innovadores de escritura del siglo XX. Una de las figuras literarias de mayor impacto de la época es Eyvind Johnson, quien destacó por modernizar el género de la novela.

El escritor nace en Svartbjörnsbyn en el año 1900, entre una familia de obreros al norte de Suecia. La baja clase a la que pertenecían no le permitió a Johnson obtener una educación formal, por lo que fue autodidacta. 

Hoy en día, se le recuerda como uno de los representantes más importantes de la segunda generación de autores proletarios, un grupo que originó en la década de 1930.

En su juventud, participó en diversos empleos para obtener dinero. Trabajó no solo en su país natal, sino también en tierra alemana, francesa, inglesa y suiza. Estas experiencias en el extranjero lo inspirarían en sus primeras obras.

Los relatos breves que lo llevaron a la popularidad fueron Los cuatro desconocidos, obra publicada en 1924. Estos escritos son semi autobiográficos, reflejando la angustia y responsabilidad que enfrenta desde una temprana edad.

Presenta un claro comentario social criticando a la burguesía en las novelas que lo catapultaron a la fama. Entre ellas, destacan Los Timan y la justicia, La ciudad en tinieblas, Recordar y Adiós a Hamlet, publicadas entre 1920 y 1930.

La singular perspectiva narrativa que Johnson ofrecía le permitió destacar entre el resto de los literarios de la época, alcanzando notoriedad a nivel mundial.

Fama en la novelística 

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Para la década de 1930, el nombre de Eyvind Johnson ya era conocido en el mundo de la literatura. Pero su obra maestra no llegaría sino hasta 1934, una tetralogía titulada La novela de Olof, que se extiende hasta 1937.

Al igual que sus trabajos anteriores, esta publicación es de tipo autobiográfico. Ofrece un vistazo al estilo de vida de la clase obrera en Suecia a inicios del siglo XX.

Este era un concepto con el que Johnson se hallaba profundamente familiarizado. La intensidad con la que narra con detalles la vida de esta clase social y las injusticias que enfrentan convirtieron a estas obras en referentes literarios.

Siendo una figura de grandes opiniones sociales, el sueco se vio interesado por el mundo de la política desde joven. Inició con una perspectiva socialista, pero luego pasó a apoyar al liberalismo. 

La tensión de la época de la Segunda Guerra Mundial lo inspiran a escribir una nueva trilogía bajo el nombre de Krilon, desde 1941 a 1943. 

Las temáticas de compromiso a la nación y la moral humana compaginaron con los eventos de guerra, siendo una de las obras más importantes de esa época.

Amor por la historia y reconocimientos

Posterior a todo el reconocimiento mundial que obtuvo con su trayectoria, se dirigió hacia tópicos más históricos, mostrando una gran pasión por la historia europea.

En 1946 publica Orillas agitadas, interpretada por los críticos como la versión modernizada de la Odisea.carlo

Causa cierta polémica con Sueños de rosa y del fuego, de 1949. En esta historia, exhibe los actos de brujería que tuvieron lugar en terrenos franceses durante el siglo XVII.

Por otro lado, en 1957, se enfoca en los tiempos de la Antigua Grecia para escribir Nubes sobre Metaponto. 

Se interesaría sobre el reinado de Carlos el Grande en La gran época, de 1960, y hablaría sobre la Edad Media en Un paso hacia el silencio, de 1974. Ese mismo año, su carrera literaria fue reconocida con el galardón de mayor prestigio.

Es honrado con el Premio Nobel de Literatura debido a su técnica de alta precisión narrativa. La Academia Sueca aplaudió su trabajo por honrar a la clase obrera y a la historia europea en sus escritos.

Un dato curioso es que Johnson compartió este reconocimiento con su compatriota Harry Martinson.